Todo se supedita al aprendizaje
Resumen
Lo que verdaderamente legitima el acto educativo es el aprendizaje. Aristóteles decía que «enseñar no es una función vital porque no tiene el fin en sí misma; la función vital es aprender». Por más brillante que haya sido la enseñanza se tiene que reconocer que fracasó si los alumnos no aprendieron.